“En esta oportunidad hicimos el curso de invierno, después vendrá el de verano que se hace en febrero. Este en el que estuvimos duró una semana y la verdad es que nos encantó, a ella como alumna y a mí como profesora, porque tuve la oportunidad de participar como oyente”, añadió.
Aitana contó que baila clásico “desde los dos años y medio, con mamá y la abuela, pero además he tomado clases en Buenos Aires con distintos profesores”, tras lo cual Evangelina subrayó que viajan todo lo que pueden, “para que ella tome clases en estudios privados y con distintos profesores, que es la idea porque sirven para unificar criterios, ya que en el país hay diferentes escuelas y técnicas. De esta manera, los maestros de todo el país podemos enseñar una técnica unificada, de modo tal que los alumnos la incorporen”.
Como profesora, Evangelina, aseguró que en Buenos Aires le “dicen que tiene muchas condiciones, me piden que la siga llevando, yo eso lo vi de chiquita, pero hay muchas chicas que son realmente buenas, por eso es necesario que siga perfeccionándose, estudiando y aprendiendo, porque el ingreso al Colón no es para nada fácil. Vemos que ella tiene las herramientas, pero hay que sacrificarse, estudiar mucho y trabajar. Durante esos días nos estuvimos levantando a las cinco y cuarto de la mañana para llegar a las clases que comenzaban a las siete y media”. www.diariolareforma.com.ar